Puede
ser que las actitudes no sean el activo que nos hagan grandes líderes, pero sin
buenas actitudes, no llegaremos a desarrollar todo nuestro potencial. Nuestras
actitudes son las que nos dan ese pequeño margen extra sobre aquellos que
piensan equivocadamente. “Lo que esta
atrás de nosotros y lo que está delante de nosotros son cosas insignificantes
comparadas con lo que está dentro de nosotros”.
Mencionare
la razón más importante para despedir a un empleado. Las respuestas son muy
interesantes y destacan la importancia de la actitud en el mundo de los
negocios.
·
Incompetencia:
30%
·
Incapacidad
de trabajar con otros: 17%
·
Deshonestidad
o mentira: 12%
·
Actitud
negativa : 10%
·
Falta
de motivación 7%
·
Fallas
o negativa para seguir las instrucciones: 7%
·
Otras
razones : 8%
Nota
que aunque la competencia ocupa el primer lugar en la lista, las siguientes
cinco razones fueron problemas de
actitud.
No
hace mucho se analizó los registros de
diez mil personas y concluyó que el 15%
del éxito se debe a la capacitación técnica. El otro 85% se debe a la
personalidad, u el principal rango de personalidad identificado fue la actitud.
Nuestras
actitudes determinan lo que vemos y cómo
manejamos nuestros sentimientos. Estos dos factores determinan en gran medida
nuestro éxito
Lo
que vemos:
La psicología 101 que vemos lo que estamos preparados para ver.
Cuentan
de un experimento doble ciego .El director de la escuela llamó a tres maestros
y les dijo: “Porque ustedes tres son los mejores maestros en el sistema y tiene
mayor experiencia, vamos a entregarles 90 estudiantes con alto nivel de
coeficiente intelectual. Queremos que ustedes trabajen con estos estudiantes,
durante el próximo año a su propio ritmo, y vean cuánto pueden aprender”.
Todos
se sintieron contentos, la facultad, los estudiantes.
Ese
año los maestros y los estudiantes disfrutaron mucho los unos de los otros. Los
maestros enseñaron a los estudiantes más brillantes; los estudiantes se
beneficiaron de la atención especial y de la instrucción de maestros altamente
capacitados. Al final del experimento, los alumnos habían logrado un
aprovechamiento de un 20 a 30% más que el resto de los estudiantes de toda el
área.
El
director llamó a los profesores y les dijo. “ Debo confesarles algo: ustedes no
tuvieron a noventa estudiantes de alto nivel intelectual, eran estudiantes
comunes y corrientes. Tomamos a noventa estudiantes al azar de entre todo el
grupo, y lo entregamos a ustedes”.
Los
maestros dijeron. “Eso quiere decir que somos maestros excepcionales”.
El
director continuo:”Tengo otra confesión que hacerles: Ustedes no eran los
maestros más brillantes. Sus nombres fueron los primeros que salieron al azar
de un sombrero “.
Los
profesores preguntaron: <<¿Qué fue lo que causó la diferencia entonces?
¿Por qué noventa estudiantes se desempeñaron en un nivel tan excepcional
durante todo el año?>>
La
diferencia, por supuesto, eran las expectativas de los maestros. Nuestras
expectativas tienen mucho que ver con nuestras actitudes .Y estas expectativas
pueden ser totalmente falsas, pero determinarán
nuestras actitudes.
Como
manejamos nuestros sentimientos:
Observa que no dije nuestras actitudes determinan como nos sentimos. Hay una
gran diferencia entre cómo nos sentimos y cómo manejamos nuestros sentimientos.
Todos tenemos momentos en que nos sentimos mal. Nuestras actitudes no pueden
detener nuestros sentimientos, pero pueden impedir que nuestros sentimientos
nos detengan. Desgraciadamente, muchas personas dejan que sus sentimientos las
controlen.
No
podemos seguir funcionan de una manera
que no concuerde con lo que creemos de nosotros mismos.
Todos
los días veo a personas que se sienten controladas. Una encuesta reciente
indica que las personas con problemas emocionales tiene el 144%
más de probabilidades de tener un accidente automovilístico, que los que
son emocionalmente estables. Un hecho alarmante revelado en este estudio es que
una de cada cinco víctimas de accidentes
fatales tuvo una disputa dentro de las seis horas anteriores a su accidente.
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